Una interrupción del negocio puede ocurrir cuando menos te lo esperas, un ciberataque, un accidente o la pérdida de un proveedor importante, lo que dificulta aún más el trato. La pandemia, por ejemplo, ha traído duras lecciones de que ninguna organización puede ser complaciente con las operaciones, y cobra más sentido estar preparado para lo peor.
Fintech es una de las verticales donde este desafío se vuelve algo más expuesto, probablemente porque es un ecosistema complejo y muy competitivo. Una interrupción puede traducirse en la pérdida de años de duro trabajo y la valiosa confianza del cliente. Además, levantarse después de una interrupción puede ser difícil, ya que es posible que tengas que empezar desde cero, realinear las operaciones y ganarte la confianza de los clientes una vez más. Es vital tener un plan para evitar tales interrupciones y manejar la situación si algo todavía sale mal. ¿Qué puede ayudar a las empresas de tecnología financiera a mantenerse en pie?
Actuar rápido.
Cuando ocurre un desastre y las cosas parecen estar fuera de control, una acción rápida puede evitar que tu empresa de tecnología financiera se desmorone. Es vital canalizar el capital de trabajo de emergencia para continuar operando. Abordar la situación sin incurrir en más pérdidas debe ser la máxima prioridad. Se hace necesaria una evaluación del flujo de caja , reservas y disponibilidad de crédito para comprender las necesidades a corto plazo e implementar cambios a largo plazo para mantener el negocio a flote. Hay que desarrollar una estrategia de recuperación para el regreso.
Crear un plan de gestión de crisis.
El siguiente paso que se debe dar es crear un plan de gestión de crisis. Evaluar la situación actual e identificar las áreas clave de riesgo operativo para el negocio. El objetivo es mantener el funcionamiento y a salvo de nuevos riesgos cuando las cosas ya están en mal estado. La protección de la infraestructura tecnológica es otro aspecto vital de la gestión de crisis porque las Fintech funcionan con tecnología. Es igualmente importante conservar la confianza de los clientes durante la crisis.
Invertir en ciberseguridad y recuperación ante situaciones de crisis.
Para las empresas de tecnología financiera, los ciberataques pueden ser el peor temor en medio de una interrupción en curso. Una revisión de la ciberseguridad y recuperación ante desastres es irrenunciable para una gestión adecuada de la crisis. Si la empresa se ejecuta en Mac, configurar la copia de seguridad de Apple Time Machine puede mantener los datos seguros. Además de proteger los datos comerciales de la pérdida, también se debe proteger de los hackers. Si no se aplican las prácticas adecuadas, se corre el riesgo de perder la confianza del cliente y la reputación.
Tener un plan financiero para el día a día.
Cuando los esfuerzos se centran en asuntos como la gestión de crisis y la recuperación de desastres, a menudo es fácil olvidar la planificación financiera diaria. El enfoque disciplinado puede encauzar el negocio durante la interrupción, sin importar lo insignificante que parezca. Se debe prestar atención a la consolidación del capital humano. Un plan financiero diario es muy útil para ayudar a la empresa a adaptarse a las fluctuaciones en RRHH durante el período de dificultades.
Enfocados en retener al equipo.
Durante una crisis tan potente como la interrupción del negocio, las organizaciones se enfrentan a la difícil decisión de reducir eventualmente sus equipos. Si bien puede ser doloroso ahora, actuar así, por sistema, puede causar brechas a largo plazo y costes de búsqueda adicionales cuando las cosas vuelvan a la normalidad. Es mejor explorar otras alternativas de reducción de costes para retener a los miembros leales del equipo durante la fase difícil. hay que considerar opciones como destinar recursos a contratos a tiempo parcial y cambiar de contratos permanentes a contratos variables. Con este enfoque, se podría retener a personas clave y también establecer la lealtad a largo plazo.
Reevaluar el modelo de negocio.
Otro aspecto crítico en una empresa de tecnología financiera ante una interrupción es la revalorización de su modelo de negocio actual. En esta etapa, se puede impulsar la reactivación ajustando productos y servicios para brindar más valor a los clientes. Las Fintechs dependen principalmente de ofrecer servicios online, lo que significa que tiene una oportunidad fácil de desarrollar un nuevo modelo de negocio si el actual no está funcionando. Habría que abordar los puntos débiles actuales de los clientes y poner el foco en la consecución de objetivos a corto-medio plazo.
Priorizar las ganancias a corto plazo.
La interrupción puede ser desalentadora para cualquier área de negocio, pero es importante mantener las esperanzas. Dar prioridad a las ganancias a corto plazo es la mejor manera de mantener la motivación durante la crisis. Puede que no sea el mejor momento para perseguir objetivos a largo plazo; más bien, desarrollar una estrategia para impulsar cambios positivos, por ahora, puede ser la clave para una recuperación sólida. Se deberían acometer tácticas que reduzcan costes, ahorren tiempo, eleven la moral de los empleados y generen apoyo para la empresa.
Elaborar un plan de reestructuración.
Ya has visto la importancia de un plan de respuesta sólido que se adapte a los desafíos y necesidades en crisis. Para crear uno, se deberá comenzar por evaluar las razones que causaron la interrupción en primer lugar. La estrategia de respuesta debería ser capaz de evitar problemas similares. Además, se deben resaltar los planes para que los empleados y las Direcciones se enfrenten a situaciones similares si vuelven a surgir. Además, se deberá proporcionar un plan de continuidad comercial que garantice una rápida recuperación del negocio.
A pesar de los desafíos específicos de dominio que enfrentan las Fintech, sigue siendo posible sacar adelante el negocio en caso de una interrupción. En esta industria, todo se reduce a devolver productos y servicios a los clientes. Al mismo tiempo, se deben hacer esfuerzos adicionales para conservar su confianza. Después de todo, la credibilidad es el activo más importante para cualquier empresa que negocie dinero.